Iniciando con el AbP en las clases de Física

Bienvenida a la Generación 2016 en la UACM-SLT

Cada inicio de clases ofrece una oportunidad para establecer nuevas metas y cambios con respecto al trabajo realizado anteriormente. A inicios de este año, comencé a escribir con más frecuencia en este blog de enseñanza y aprendizaje de la Física partiendo de dos premisas fundamentales: el escribir permite ordenar las ideas y reflexionar sobre la práctica docente y compartir lo que sucede en el aula abre la posibilidad de mejorar a partir de la retroalimentación de otras miradas y opiniones. Después de un semestre de realizar este ejercicio he acumulado más preguntas que certezas sobre el aprendizaje de las Ciencias en la Educación Superior, pero he clarificado muchos de los principios subyacentes a mi papel como docente, lo cual me ha permitido formularme nuevas metas, acercarme a otros colegas y comenzar a colaborar con ellos.

Este semestre he decidido utilizar la aproximación de Aprendizaje basado en Proyectos (AbP), para lo cual me inscribí en el MOOC de Scolartic sobre este tema. Mi interés por intentar una aproximación diferente a la enseñanza de la Física había comenzado como una cosquilleo a partir de conocer uno de los principios de buen aprendizaje señalado por Juan Ignacio Pozo: la práctica debe adecuarse a lo que se debe aprender. Después de entrar en contacto con las propuestas como la Educación Expandida, el EduPunk y el Aula Abierta, la comezón se convirtió en urticaria, al sentir que mi formato de enseñanza seguía muy atado a la transmisión de contenidos, a pesar de intentar trabajar en dirección del aprendizaje activo. Como diría Fernando Trujillo me faltaba dar el paso del paradigma de los contenidos al paradigma de la acción. Por eso,  a los principios de mi práctica docente que he mencionado en una entrada anterior, incluyo ahora la importancia de abordar problemas cercanos al entorno de los estudiantes de manera activa, lo que implica abrir las paredes del aula y ampliar el alcance del trabajo universitario. En la enseñanza de la ingeniería existe una tradición de enseñar primero la Física y las Matemáticas que eventualmente se aplicarán en problemas concretos. El trabajo docente se concentra en organizar de la mejor manera posible el material que se va a exponer a los estudiantes y en resolver los problemas que se presentan al final de capítulo de los libros de texto, los cuales son resueltos por el profesor en la clase y abordados por los estudiantes en tareas y exámenes. Un ejemplo de estos problemas se presenta a continuación (del libro de texto de Bauer):

Trabajar por proyectos en una clase de Física Universitaria implica partir del análisis y preguntas alrededor de un problema real y a partir de ahí decidir qué contenidos y herramientas serán necesarias para aproximarnos a una posible solución.  El canvas de un proyecto ABP diseñado por conecta 13, es un excelente guía para plantear un trabajo robusto y como resultado del curso realicé la siguiente presentación:

Trabajar usando AbP requiere un gran esfuerzo, pero me parece que vale la pena implementar nuevas maneras de acercarse al aprendizaje. Además, este enfoque no se encuentra peleado con la línea de investigación que estaba realizado sobre la apropiación de los conceptos de Física a través del uso de modelos físicos, que vengo trabajando con mis colegas Mateo Barkovich y Alexandra Carreño. Tampoco es la primera vez que se trabaja mediante proyectos en las clases de Física de la UACM, ya que otros colegas lo han intentado con anterioridad, aunque sin socializar sus resultados. Para mi es muy importante abrir este proyecto y mi aula para poder impulsar comunidades de práctica docente universitaria, donde podamos discutir, compartir y colaborar. Para alguien interesado en aproximarse al AbP para la enseñanza/aprendizaje de la Física en Educación Superior el siguiente enlace del Collegial Centre for Educational Materials Development presenta proyectos muy interesantes.

Al final, el gran reto consiste en desafiar a la comunidad universitaria a abordar los problemas que tenemos en nuestro entorno, a generar y utilizar un gran abanico de herramientas y plantear soluciones que tomen en cuenta la complejidad del entorno en que vivimos en la actualidad.